Cuando se inyecta, la toxina botulínica bloquea determinadas señales nerviosas que producen la contracción de los músculos. Los músculos se relajan, con lo cual se reducen las arrugas. Este efecto dura aproximadamente entre 3 y 6 meses. Luego, los músculos vuelven a moverse y las arrugas reaparecen.
¿En qué consiste?
Tres días después de la inyección, notará que algunos músculos comienzan a relajarse. Después de 1 semana, es probable que vea menos líneas y arrugas faciales. Este efecto desaparece en un período de 3–6 meses. Las inyecciones de toxina botulínica generalmente funcionan para la reducción de arrugas..